A QUÉ SABE LA LUNA

Este precioso cuento es de Michael Grejniec.
Comienza como una leyenda: “Hacía mucho tiempo que los animales deseaban averiguar a qué sabía la luna”. Y a partir de aquí,  pasan ante nosotros diversos animales, a los que de otro modo no veríamos juntos, puestos uno encima del otro: primero una tortuga, recordando lo que algunos mitos antiguos describían, que la tierra estaba sujeta por dicho animal; más tarde un elefante, luego una jirafa, a la que de nada le vale su largo cuello, una cebra, un león que, como es el rey de la selva podría llegar hasta ella, luego un zorro, encima del cual se subió un mono, que como era capaz de dar grandes saltos podría conseguirlo, pero ninguno de ellos llega a alcanzar la luna, que por su parte, se burla de los animales alejándose un poco cada vez.

Cuando creían que nunca llegarían a probar el sabor de la luna, el ratón se subió por encima de todos los animales y logró arrebatar un pedazo del astro, que fueron saboreando uno tras otro.
Y ¿a qué creéis que sabía?...
Eso lo dejamos para vuestra imaginación, o si queréis saber el final de este fantástico cuento, ved el vídeo, pues el final también os sorprenderá: